Llegamos a febrero para irnos
despidiendo del invierno y prepararnos para los cambios que van a suceder con
la entrada de la primavera. Atención a los que vivís en la otra parte del
planeta donde ahora es verano, porque el cambio también se produce.
En el mundo celta, la festividad
de este gran cambio se celebra el 1 de febrero. Imbolc y la Diosa Brigid.
En esta ocasión se me presentó como
la Diosa Blanca, donde me cubría con su velo blanco invernal, como un polvo de
estrellas plateado y me revelaba la importancia de respetar la quietud, el
silencio y la inactividad de la naturaleza en invierno y en nosotros mismos.